Con motivo del 20 aniversario del Festival Rec de Tarragona, el certamen dedicado a las óperas primas propuso una selección de películas que han marcado la historia del festival en el programa 20_20 que ha podido disfrutarse en Filmin durante las últimas semanas. Algunas de estas películas siguen disponibles en la plataforma, como es el caso de Pure, la ópera prima de Lisa Langsteh.
Además del de su directora, Pure supuso el debut delante de la cámara de su protagonista, Alicia Vikander. La actriz sueca contaba con 22 años cuando en 2010 se estrenó una película que le valió el premio de la Academia Sueca a la mejor actriz. Tan solo cinco años después de su debut en una pequeña película sueca, Vikander conseguiría el Oscar a la mejor actriz secundaria por La chica danesa.
La película nos cuenta la historia de Katarina, una postadolescente conflictiva, hija de una familia desestructurada, con un pasado muy reciente relacionado algún escándalo sexual indeterminado, agresiones a menores y usuaria de un programa de los servicios sociales. Con tan solo 20 años ya tiene un pasado que no solo arrastra, sino que también le persigue.
Si existe un destino, el suyo no es halagüeño, pero su determinación es más fuerte que su mala fortuna. Su vida cambia cuando, aleatoriamente, encuentra y escucha una pieza de Mozart en Youtube. Un nuevo mundo se abre a través de sus oídos, y ella quiere formar parte de él.
Por error, pero por suerte, es contratada para trabajar como recepcionista en el auditorio del conservatorio de una ciudad nórdica indeterminada. Cae en gracia a sus compañeros, especialmente al director, que se encapricha con ella… pero mientras que para él solo es una aventura, para ella es la puerta a ese mundo que anhela habitar.
Pure es una maravillosa película sobre el enfrentamiento personal contra los prejuicios y contra la vida que nos han escrito, existencia contra la que no podemos luchar si nosotros mismos no ponemos de nuestra parte. Es una película contra el determinismo y en favor del ascensor social auspiciado por servicios sociales, la cultura, la literatura, la música…
Podría parecer el de la película un discurso elitista, pero Pure quiere dejar patente que las artes, cualquiera de ellas, son mucho más permeables que los recelos que amurallan nuestros prejuicios. Prejuicios bidireccionales que no permiten a menudo la búsqueda de las cosas bellas lejos de tu entorno social y cultural, y que estas cosas bellas no son pasatiempos pasajeros, sino que pueden llegar a convertirse en lugares donde quedarse.
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