Desde que la COVID-19 cerrara los cines en España se han perdido 546 millones de euros, un 87% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior
El día 13 de marzo de 2020 se cerraron los cines en España. Se cumple un año desde entonces y ya podemos contabilizar las pérdidas, que son muchas. Las podemos contabilizar en 542 millones de euros. Una barbaridad.
Desde la semana 11 del año pasado hasta la semana 10 de este mismo año, apenas se han recaudado 82.5 millones de euros en taquilla. Esto contrasta con los 629 millones de euros que se obtuvieron un año antes, desde la semana 11 del año 2019 a la semana 10 del año 2020. Lo vemos:
Por lo tanto, se han perdido la friolera de 546 millones de euros, lo que supone la caída del 87% en la recaudación.
Se puede intuir además la influencia de las tres olas del coronavirus, puesto que con ellas han llegado medidas muy restrictivas en aforos, toques de queda y confinamientos varios en las distintas comunidades autónomas.
Los grandes perdedores son los cines
Los más perjudicados, obviamente, han sido las propias salas de cine. Entre las medidas anteriores y el posterior retraso de prácticamente todas las películas de Hollywood, los cines no han levantado cabeza. Si no llega a ser por los ERTEs a los que se han podido acoger, la mayoría no hubiese sobrevivido.
Además, para ellos la amenaza ahora se llama ventana de exhibición, que es el periodo en exclusividad que una película está en cines. Debido a la pandemia, las grandes distribuidoras han forzado la máquina para que ésta se redujera o desapareciera. Estas distribuidoras están embarcadas ahora mismo en otra guerra, la de las plataformas, en la que Netflix es el líder indiscutible.
Así, estas majors (Disney, Warner, Paramount) han apostado fuertemente a un crecimiento rápido del número de suscriptores en sus plataformas. Para ello, necesitan que sus películas se estrenen cuanto antes en ellas, reduciendo esa ventana de exhibición, que es justo el momento en el que nos encontramos en estos momentos.
Las nuevas reglas del juego son las que se están estableciendo ahora y son las que marcarán el futuro a medio plazo tanto de las distribuidoras como de las exhibidoras. De ahí, el «boicot» a Raya la semana pasada, por ejemplo.
Futuro
Estas nuevas reglas son las que marcarán el futuro a medio y largo plazo, en la que también tendrán que ver los cambios de hábitos de consumo del público en general. Y, en particular, de los más jóvenes que podrán, o no, decidir seguir consumiendo películas en su plataforma en vez de ir al cine de manera definitiva.
A corto plazo, son las vacunas las que más afectan. En la medida en la que éstas se vayan aplicando, supondrán una mejora en la taquilla. La semana pasada se abrieron los cines en Nueva York y en esta se abrirán los de Los Ángeles. Si allí, las vacunas tienen efecto (que es lo que parece), los cines abrirán y eso supondrá que las majors dejarán de retrasar estrenos. Estos irán llegando poco a poco a todos los cines, incluidos los españoles, y el público en general volverá al cine.
Si volverá todo el público a las salas o habrá una parte que se quede en casa, es algo que todavía no sabe nadie, pero lo sabremos. Y se lo contaremos.
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