Nomad. In the footsteps of Bruce Chatwin se presentó en los festivales de Sheffield Doc/Fest, Tribeca, Vancouver y Gijón y está disponible en Filmin, en la sección dedicada al Festival D’A 2020.
Werner Herzog rinde homenaje al escritor y amigo personal Bruce Chatwin en Nomad. In the footsteps of Bruce Chatwin, que se presenta en la sección Direccions del Festival D’A 2020. Aunque los libros de Chatwin se han traducido, el personaje es poco conocido fuera de la literatura de viaje o la antropología, con lo que Nomad parecía una buena ocasión para descubrir una personalidad que debió ser fascinante.
No cabe duda que a Herzog le marcó profundamente su amistad con el escritor. Tanto es así que más de treinta años después de su muerte, acaecida en 1989 por causa del Sida a la edad de 48 años, sigue estando muy presente en la vida del director alemán, hasta el extremo de recordarlo con lágrimas en los ojos. Lo que vemos en el documental es la huella de Chatwin en Herzog, más que una biografía al uso donde se glose la personalidad del retratado.
Al principio escuchamos la lectura de unos de los pasajes de su libro más conocido, En la Patagonia, donde evoca un recuerdo de niñez y la búsqueda de la piel de un dinosaurio extinto. Si el tono continuara así podríamos decir que hemos oído la voz de Chatwin, pero ese pasaje es de cuando Herzog y el escritor aún no se conocían; a partir de entonces, y coincidiendo con su encuentro en Australia, lo que vemos es la evocación de un fantasma en relación a Herzog.
Nos habla su biógrafo, su viuda, la gente que lo trató en sus viajes, y nos habla Herzog de su adaptación de Cobra Verde, de sus conversaciones y chistes, de la mochila que le legó -casi una película en sí misma-, de sus duros últimos momentos, con un único plano compasivo de su degradación física… pero aunque el director alemán insista en que “esto va de Chatwin, no de mí”, lo cierto es que la voz de Chatwin no aparece más.
Como glosa a la amistad, como aceptación de su influencia en la vida de Werner Herzog, Nomad. In the footsteps of Bruce Chatwin funciona perfectamente; como vehículo para descubrir una personalidad que se nos dice que fue chispeante, hay demasiada obra y palabra de Herzog como para conseguirlo. Si es cierto, como dice su biógrafo, que Chatwin “no escribía medias verdades, sino verdad y media”, puede que todavía quede un buen filón para un futuro documental; uno en el que descubramos la esencia de un escritor al que acompañó la controversia por su tendencia a ficcionar la realidad.
En el apartado formal no cabe duda que Herzog ha cuidado minuciosamente de que el documental refleje la grandiosidad de los paisajes, con unos planos aéreos de fotografía impresionante; mención especial también para la banda sonora, con majestuosas composiciones que pausan el ritmo y acompasan la narración. Para los fans del director es una buena ocasión de profundizar en su filmografía e influencias, y una obra muy disfrutable; quien quiera saber como era Bruce Chatwin, deberá esperar un poco más.
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